MARÍA CECILIA FOULON
María Cecilia Foulon es como aquel ángel que nunca
duerme y sin embargo vela porque se realice cada uno de los sueños que
se mueven como los elfos, en los bosques secretos alrededor del mundo.
María Cecilia se ha robado furtivamente la delgadísima
capa que cubre algunos de esos sueños y ha creado a partir de esa piel
de musgo y muselina imágenes que despiertan en el espectador el deseo de
soñar, de escapar de la urdimbre urbana y morar con los elfos en
laberintos y cavernas, al pie de gigantescas secoyas o de dálmatas
abedules.
Una secuencia de arpegios se desplaza tras estas
veladuras digitales en las que un pájaro se convierte en canción o en
sonata. Ella incide en los colores del ordenador como lo un Wolenweider
o un Kítaro con las claves de un órgano. Pero usted no sólo escucha un
órgano, es posible imaginar clavicémbalos, flautas, cuernos, oboes. Ella
sólo ofrece las claves, como el ángel que nunca duerme, para que
nosotros interpretemos al antojo nuestros propios y más preciados
sueños.
FERNANDO UREÑA RIB